Existe la creencia de que la tecnología auditiva es tan robusta que genera el aprendizaje auditivo por sí sola. Hay algunos adolescentes y adultos que, tras haber escuchado toda su vida, perciben un progreso rápido y fluido en un corto tiempo tras haber recibido sus auxiliares auditivos o su implante coclear. Para estas personas, sus calibraciones regulares de la mano de un audiólogo que pueda responder sus preguntas pueden ser suficiente.  

Sin embargo, la mayoría de las personas necesita orientación para aprender a interpretar y obtener la máxima claridad de la señal auditiva proporcionada por su tecnología ya que escuchan el lenguaje poco claro, distorsionado o presentan dificultad para escuchar en condiciones como distancia, ruido y/o velocidad. El apoyo de un profesional experimentado en la rehabilitación auditiva puede ayudar a resolver las dificultades mencionadas. La adaptación a una nueva tecnología auditiva es un proceso dinámico que puede ser facilitado con la adecuada orientación de un profesional.